Proteger funciones de este Poder de intereses fácticos o criminales, entre los objetivos del proyecto, destaca Ernestina Godoy
Senadoras y senadores de todas las fuerzas políticas dieron inicio al análisis del proyecto de decreto, por el que se reforma la estructura, organización, funcionamiento, mecanismos de disciplina, elección e integración del Poder Judicial.
La plenaria inició con un minuto de silencio en memoria de Susana Ramos Caro -abuela materna de la senadora Reyna Celeste Ascencio Ortega, de Morena-, quien falleció el pasado 6 de septiembre.
Posteriormente, el presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, explicó que el dictamen considera la minuta que aprobó la Cámara de Diputados, el pasado 4 de septiembre, y que se le dio trámite de primera lectura en la sesión matutina de este martes.
Y la presidenta de la Comisión de Puntos Constitucionales, Ernestina Godoy Ramos, presentó a la asamblea el contenido de la reforma, cuyo resultado es producto de una amplia discusión y análisis en todo el país.
Sólo entre los meses febrero y julio de este año, agregó, se realizaron más de 50 foros, diálogos estatales y regionales, en la cámara de diputados, congresos locales y plazas públicas, donde participaron integrantes de todos los Grupos Parlamentarios.
La reforma del Poder Judicial es y ha sido una de las iniciativas más analizadas y debatidas en nuestra democracia parlamentaria, proceso que permitió enriquecerla y hacerle más de 100 modificaciones y precisiones a la iniciativa original, enfatizó la legisladora.
Con ella, dijo, se reconfigurará el sistema judicial mexicano, de tal manera, que se asegure la autonomía, independencia y especialidad técnica de los órganos jurisdiccionales; la participación ciudadana en la designación de sus titulares; y la administración de justicia de manera pronta y expedita.
Se trata, destacó Ernestina Godoy, de garantizar la independencia y autonomía del Poder Judicial, separar sus funciones del poder político y económico, protegerlas de intereses fácticos o criminales.
“Es un imperativo para lograr que la justicia alcance a todas y a todas, sin importar su ingreso o su influencia política, económica o social”, puntualizó.
“Coincidimos, es necesario avanzar en los otros componentes: prevención, procuración, atención a víctimas, defensoría pública, justicia cívica, entre otros puntos, para lograr una respuesta integral al reclamo social de justicia, pero no podemos esperar hacer todo para avanzar en esta trascendental reforma”, consideró la senadora.
El presidente de la Mesa Directiva, Gerardo Fernández Noroña, informó que se recibieron tres mociones para suspender la discusión del dictamen, de los grupos parlamentarios del PAN, PRI y Movimiento Ciudadano.
Sin embargo, aclaró que el reglamento del Senado establece en el artículo 106, numeral cinco, que no se admiten más de una solicitud sobre el mismo asunto.
De esta manera, el senador Agustín Dorantes Lámbarri presentó en la tribuna una moción para interrumpir la discusión de la minuta, ya que, si la reforma se concreta, advirtió, el Poder Judicial “caerá” y quedarán indefensas miles de personas, porque no habrá quien los ampare.
El legislador de Acción Nacional argumentó que no se han escuchado los llamados del Poder Judicial ni de la ciudadanía; además, señaló, se ha presionado y extorsionado a los senadores de oposición, para que no voten en contra de la reforma.
También hizo un llamado a los senadores José Sabino Herrera Dagdug y Araceli Saucedo Reyes, de Morena, así como a Miguel Ángel Yunes Linares, del PAN, y Daniel Barreda Pavón, de Movimiento Ciudadano “ser valientes y representar a quienes los eligieron”, porque “si hoy aprueban esta reforma, la historia los recordará como traidores”.
Sin embargo, la moción suspensiva fue rechazada con 85 votos en contra y 41 a favor, y la asamblea dio paso la presentación de los votos particulares que registraron senadores de los diferentes grupos parlamentarios.