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Neoliberalismo.

Nuestra máxima institución educativa de nuestro país ha declaro la presencia de una enemistad en el sistema de educación de México y no, no es ningún sindicato ni coordinadora, no es ninguna escuela normal, no es la poca o nula capacitación docente, no es la falta de escuelas en zonas rurales, ni si quiera es la cultura que hace apología del delito, del crimen o de la discriminación que se extiende a través del internet, la música y la televisión, el enemigo contra quien nuestra Secretaria de Educación emprenderá una cruzada se encuentra en los libros de texto y es nada mas y nada menos que las palabras neoliberales que se encuentran plasmadas ahí, algunos ejemplos son: Eficiencia, productividad, sociedad del conocimiento, calidad educativa y competencia.

Es cierto que el material educativo ex profeso los libros de texto necesitan una revisión profunda, y no hace falta evidenciar que la educación que nutre la competencia ha dejado de lado algunos valores sociales como el trabajo en equipo, la confianza, la comunidad, pero sinceramente este no compone la totalidad del mal que nos atañe como sociedad. Piénselo usted, a los niños se les enseñaría una nueva visión cultural alejada de la competitividad y el interés personal, pero los maestros que les deberían clases no van a las aulas porque tienen un interés gremial, que procura mejores salarios y mejores condiciones personales, dejando de lado a los profesores, esos mismos alumnos buscarían un empleo en una empresa que tiene como objetivo principal maximizar su utilidad y que busca bases curriculares de universidades privadas donde el costo de un semestre en ocasiones supera toda la vida estudiantil de un individuo que emerge de escuelas publicas. Después de todo eso esos mismos alumnos adquirirán sus pertenencias en un sistema de créditos bancarios y departamentales que reducen al ser humano a una especie exprimible que de gota a gota va desembolsando sus pesos ganados en un sistema de competencia y mercado.

El neoliberalismo es un sistema que reduce la participación del estado en la producción de bienes y servicios, espacio que es ocupado por el mercado libre (la empresa privada), sin embargo este no es un capitalismo puro, el Estado tiene la rectoría de sus leyes, leyes que en la medida de su flexibilidad permiten la movilidad del mercado. Menciono esto porque la pregunta es ¿de que sirve quitar conceptos de los libros de texto que en la realidad (fuera de ellos) son absorbentes y en donde el Estado no ha mermado al sistema neoliberal en ninguno de sus frentes?, no quiero que se confunda mi pregunta, creo que la desmedida del mercado libre ha proporcionado bastante des humanidad a un mundo que hoy la necesita mas que nunca, pero la SEP esta haciendo lo mismo que la nada al preocuparse tan solo con algunos conceptos de los libros de texto, ¿Cuándo pararemos a los sindicatos? ¿Cuándo meteremos en cintura a la coordinadora? ¿Cuándo se limpiarán las normales? ¿Cuándo tendremos escuelas con lo necesario para que los niños tengan las herramientas que ellos necesitan? ¿Cuándo desinflaremos la burocracia administrativa de la SEP para inflar los salarios de los docentes con vocación? Entiendo que los libros de texto tengan nuevos conceptos, pero como ya lo dije, ese contenido es el menos malo en un sistema que no opera bajo los lineamientos propuestos.

No hagan del concepto el mal, eso me recuerda a José Rubén Romero con su Pito Pérez y su “pobrecito del diablo, que lastima le tengo”, el presidente arremete contra una palabra, y sus fieles sin conocimiento de causa lo hacen también.

Eppur si muove

A regañadientes

Inauguro esta parte de mi columna como razón de cuando exista un motivo que me es deplorable, esta vez me es triste anunciar que mientras escribía este articulo me ha llegado la notificación de que en Oaxaca ha sido asesinado en su estudio de grabación el periodista Heber López. Al parecer la democracia solo sabe vestirse de negro en nuestro México, mientras desde el pulpito presidencial se tenga en especifico una sección contra el periodismo, el presidente se vuelve comparsa de la atrocidad.

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