Por: Yurisha Andrade Morales
Diversos estudios concluyen que “la participación y representación adecuada de las mujeres en todos los niveles de gobierno es una condición necesaria para el fortalecimiento de la democracia…” (CIDH, 2011). Para que este propósito se convierta en realidad es imprescindible implementar medidas para garantizar los derechos políticos de las mujeres; sobre todo, eliminar de tajo las distintas modalidades de violencia en contra de ellas. Es un hecho que, pese a los logros alcanzados, aún enfrentamos múltiples obstáculos para acceder a puestos de poder que limitan nuestras posibilidades frente a los hombres.
Ello exige evaluar si la democracia como fórmula de organización política y de vida está o no generando condiciones de viabilidad para arribar a la igualdad sustantiva. Coincidimos en que durante los últimos treinta años hemos logrado un andamiaje institucional para tener elecciones libres, auténticas e inclusivas, que lamentablemente no han logrado erradicar la violencia en contra de las mujeres.
Conforme a datos de ONU Mujeres, ya en 2021 el 49% de la población mundial somos mujeres, cerca de 4 mil millones, de las que, una de cada tres, afirma que, al menos una vez en su vida, sufrió violencia física o sexual por parte de una pareja íntima, o violencia sexual perpetrada por alguien que no era su pareja (el 30% de las mujeres de 15 años o más).
En el ámbito parlamentario, la propia ONU Mujeres, señala que el 82% de mujeres en 150 países reportó sufrir algún tipo de violencia psicológica durante su mandato, expresada en comentarios, gestos e imágenes de naturaleza sexista o sexualmente humillante, amenazas y acoso laboral por vía de redes sociales y el 44% señaló haber recibido amenazas de muerte, violación, agresión o secuestro dirigidas en contra de ellas o sus familias; mientras que el 65% fue objeto de comentarios sexistas por parte de colegas hombres en parlamentos (https://evaw-global-database.unwomen.org/en).
Es lamentable, pero la violencia contra mujeres, en sus diversas modalidades, continúa manifestándose en diversos segmentos de la sociedad mexicana. De nuevo, los datos estimados por la ONU para 2022 indican que 736 millones de mujeres en todo el planeta han experimentado violencia física o sexual por parte de su pareja, siendo las mujeres de la comunidad LGBTTTI quienes sufren mayor cantidad de homicidios, rubro en el que México es el segundo lugar después de Brasil.
Fue el viernes pasado, 25 de noviembre, cuando conmemoramos el “Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra las mujeres. Se trata de un día instituido por la ONU en el que todas y todos debemos converger en esfuerzos para exigir que gobiernos, sociedad civil, comunidad internacional, instituciones públicas y privadas, condenen e implementen acciones para erradicar la violencia que se ejerce en contra de las mujeres, solo así lograremos perfeccionar nuestra democracia y alcanzar la igualdad sustantiva.
Considero que la violencia política en razón de género, es el obstáculo más grave que enfrentamos las mujeres para el ejercicio pleno de nuestros derechos político-electorales, lo cual sigue siendo un resabio de la discriminación generada por estereotipos de género que aún condenan a las mujeres a roles esencialmente domésticos y aunque la VPG se presenta en todos los espacios de nuestro quehacer cotidiano, ahora tenemos mayor conciencia de ello y disponemos de mejores herramientas para identificarla, combatirla, sancionarla y erradicarla.
El 25 de noviembre no solo es una fecha histórica sino una celebración permanente en la búsqueda de igualdad e inclusión. Es un buen momento para hacer una cruzada nacional con un compromiso social donde todos aportemos en favor de esta importante causa. Como sociedad, todos merecemos vivir en libertad y sin ningún tipo de violencia, es tiempo de que actuemos en consecuencia y en la misma dirección. No dejemos que la conmemoración de una fecha tan importante en el mundo sirva solo para adornar los discursos. Queda mucho camino por recorrer.
*Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán
@YurishaAndrade
