Por: Yurisha Andrade Morales*
El 7 de septiembre de este año, el Instituto Nacional Electoral presentó una evaluación sobre las pruebas piloto realizadas en materia de voto electrónico entre 2020 y 2022, considerando la información concentrada por sus áreas técnicas en relación con la definición del alcance de las pruebas, los dispositivos usados, la definición del modelo de operación, los actos preparatorios de la jornada electoral, el desarrollo de la votación y los actos posteriores a ésta; así como la percepción ciudadana captada por encuestas y medición del tiempo utilizado para votar que permitió saber si la aplicación de tecnología fue compleja o no para los y las ciudadanas; igual se consideró la opinión de partidos, candidaturas independientes y observadores electorales.
En artículos anteriores he comentado que, en los últimos tres años, el INE, en coordinación con los institutos electorales de Coahuila y Jalisco, ha utilizado diversos modelos de urnas electrónicas, tanto en elecciones locales como federales, para conocer la aceptación que pudieran tener entre la ciudadanía y la eficacia para recibir y contabilizar la votación. En lo referente a la confianza externada por los electores sobre los dispositivos electrónicos poco más del 70% señaló tener mucha confianza que, sumado a quienes solo dicen tener una confianza regular, suman más del 90% de electores y actores políticos.
Destaca el hecho de que las personas consultadas señalaron que el uso de la urna electrónica es muy fácil, dado que no presentan dificultad alguna para sufragar, lo cual se suma a la expresión de los funcionarios de mesas directivas de casillas que opinaron que no tuvieron problemas para iniciar la votación o para realizar los escrutinios respectivos.
Como sabemos, los ejercicios implementados por la autoridad electoral tuvieron carácter vinculante y, conforme a la evaluación presentada, se obtuvieron resultados favorables para recibir la votación cuyos tiempos máximos contados desde que el ciudadano está frente a la pantalla y hasta que se retira de la misma promedia un minuto con dieciséis segundos en 2021 con varias elecciones y 46 segundos en 2022 con una sola. Mientras que los escrutinios y cómputos tuvieron promedios de apenas 29 y 38 segundos, respectivamente.
Los resultados de la implementación de dichas pruebas piloto indican con claridad que la confianza ciudadana en los instrumentos electrónicos es ampliamente mayoritaria y que es posible avanzar en pruebas de mayor volumen y alcance que en un plazo razonable permitan agilizar la votación en todas las elecciones y en todo el país. Pero lo más relevante consiste en la celeridad que se puede lograr para obtener el resultado final en cada casilla, lo cual se ha convertido en uno de los problemas más importantes que enfrentan los funcionarios en las casillas únicas sometidos a jornadas inhumanas que en muchas ocasiones terminan al día siguiente.
En mi opinión, el futuro del voto electrónico en México sigue dependiendo de que los actores políticos logren consensuar su incorporación en la Constitución y en las leyes electorales que rigen nuestras elecciones. Hace falta el establecimiento de acuerdos políticos que permitan la incorporación de tecnología que modifique y agilice la forma de recibir y contar los votos en nuestro país, lo cual constituye un imperativo para economizar en la organización electoral pero también para fortalecer la confianza y la certeza de los resultados electorales.
También es necesario el acompañamiento de los medios de comunicación y de la sociedad para legitimar la utilización de las urnas electrónicas y, más adelante, de plataformas para el voto por internet, que hoy solo se utiliza para la votación de los mexicanos residentes en el extranjero, pero que podría constituir una solución eficaz para consultas populares, ejercicios de revocación de mandato o elecciones internas de los partidos políticos. La tecnología forma parte de nuestra vida cotidiana en diversas modalidades y es urgente sumarla a nuestras elecciones.
*Magistrada del Tribunal Electoral del Estado de Michoacán
@YurishaAndrade