Por: Alejandro Carrillo L.
He tenido la oportunidad de leer un libro en esta semana llamado Voltaire contra los Fanáticos de Fernando Savater, en dicho texto, me ha asombrado encontrar una gran diversidad de citas que hace el escritor respecto de aquel pensador francés del periodo de la Ilustración. En este texto se explica que el fanatismo rige su valor cuando trata de imponer su pensamiento como una verdad común y dominante, destituyendo cualquier opinión contraria hacia lo absurdo, volviendo como mínimo e inclusive detestable cualquier otro tipo de pensamiento.
Hoy este país (el nuestro) se encuentra frente a una coyuntura que definirá por lo menos algunos años futuros, el redentor del pensamiento fijo se encuentra en palacio nacional y con toda la intención posible ha hecho que nuestro México se divida entre un pueblo bueno y uno malo; en verdad ahora más que nunca se entiende que al presidente no le importa trastocar cualquier línea de conciencia, al principio atacar a través de su voz a los políticos era algo esperado, después abordo hablar de los que concentran riquezas contra los que no, hablo posteriormente de actores y actrices a favor y en contra del tren maya, y en esta semana se atrevió a perpetrar en el terreno de los médicos, una profesión que esta siendo premiada en el mundo por su actuar en la reciente pandemia y a la cual hoy se le difama en el país porque no cumple con su razón social (según el presidente).
Donde esta el INSABI, hoy es solo un recuerdo efímero, ¿Qué a caso no era ese instituto de salud aquel que llegaría a los mas necesitados? Pues no fue así. ¿Y el IMSS BIENESTAR que promueve? La respuesta es fácil, hacer de los números rojos del seguro social, números mas rojos.
Sin embargo, todas estas atrocidades no podrían ser tan fáciles de borrar o mantener (dependiendo el caso) sin el ejercito de los fanáticos que imploran recibir un poco del calor redentor de su mesías, ¡es un honor estar con obrador! Lo gritan con fervor, lo apapachan desde cualquier voz. Lamentablemente no pueden soportar la critica, no podrían, no es la verdad, no es su verdad; quizás sea una razón que quienes critican tampoco han logrado hacer algo por lo menos notable por el país en su momento, y que entiendan los demás partidos (los de oposición) que Andrés Manuel este mal, no los hace ejemplo de hacer las cosas bien, simplemente los rebasaron.
El fanatismo siempre dañino porque posiciona un pensamiento como verdadero, es dañino en cualquier espacio, en el futbol, en el debate, en el periodismo, en lo religioso, pero en nada ha hecho más daño como en lo político. A todos esos fanáticos que incluso se proclaman cristianos porque el presidente así se observa les dejo la siguiente cita bíblica:
Juan 18:38 le pregunta Pilato a Jesús: ¿Qué es la verdad? acto seguido salió de nuevo con los judíos y les dijo: yo no hayo en el ningún delito.
Es curioso ¿no? Jesús al cual Attolini ve reflejado en Andrés Manuel, no contesto la pregunta que le hizo Pilato, no dijo nada acerca de una verdad, entonces ¿Por qué ustedes fanáticos se proclaman como únicos propietarios de ella.
Eppur si muove
A regañadientes. México necesita políticos, necesita ciudadanos, si alguien de ustedes ve la diferencia entre unos y los otros, entonces no son lo que necesitamos.
